El profundo abismo de tus ojos
Alza en verso una belleza fría
Un despertar sosegado
Un delirante murmullo devorado
Por ese sabio ya viejo que llevas adentro
Quizás un breve fragmento de un poema que escribiste
Si acaso no un pasar ajeno
¿Ves mi cataléptico poeta cuanto te han crecido las alas?
Es hora ya que remontes el vuelo
Que cantes desde la bóveda celeste y te rías de nuestras alabanzas
Que te dejes caer en lo alto de la gloria
Gloria preparada sólo para algunos
Para quienes no se someten al tiempo presuroso
Déjate ser en tu pluma locuaz
Vive en el marco de la hoja que te muestra cual cristal
No te derrames en tu líquido furioso
Pues eres en tus líneas y no en estas de papel y tinta
Merecido homenaje a uno los artífices silenciosos
de mi escritura.